YA OLVÍDATE DE LA PANDEMIA
Sí era una tristeza volar sin tener la certeza de nada, más que la de tener deudas, deudas tú y tu familia. Las cosas se hicieron pomada cuando la pandemia nos atacó tan despiadadamente y el que no quiera creerlo, que fue un ataque despiadado en el amplio sentido del término, que le pregunte a los millones de personas que perdieron a amigos, familiares y conocidos, había sido una verdadera masacre y ni culpar a nadie, porque había sido una masacre mundial. Pero no solo se enfocó en la muerte de tantos y todas las implicaciones filosófico religiosas que se le pueden asignar al hecho, sino las consecuencias económicas son devastadoras. Exactamente así me sentía esa mañana, devastado, volando de aquí a allá después del enésimo intento por conseguir sustento sin poder lograrlo, el punto es que mis amadísimos acreedores no esperan, la luz y el gas son los más tiernos que tengo, pero el verdadero gigante era el pago del internet, ahí radica el concepto de prioridad: ¿Una caja de leche